El 25 de julio de 1978, nació la primera bebé por el método de fecundación “in vitro” (FIV), conocida popularmente como la “bebé probeta”. Louis Brown, hija de Lesley y John Brown, actualmente tiene 44 años de edad y se dedica a dar conferencias relacionadas al tema de FIV para familias que no están convencidas de la técnica.
Lesley y John, llevaban aproximadamente nueve años intentando tener un hijo, sin embargo el problema que Lesley tenía en las trompas de Falopio hacía imposible que existiera la fecundación. A pesar de que los padres de Louis nunca se dieron por vencido, parecía que solo milagro les permitiría tener un bebé.
Pero no fue un milagro lo que les ayudo, más bien fue un avance a la ciencia. Los doctores Patrick Steptoe y Robert Edwards llevaban investigando un par de años algún método que pudiera solucionar los casos de esterilidad en familias como los Brown.
Su método consistía en extraer un óvulo de la mujer, fertilizarlo en el laboratorio con el esperma del hombre y una vez formado el embrión, introducirlo en el útero materno, donde se desarrollaría.
Los padres de Louis fueron advertidos de que el éxito era mínimo con este procedimiento, sin embargo recurrieron a esta técnica para cumplir su deseo, que tiempo después pudo cumplirse sin ninguna complicación.
Evidentemente al ser un tratamiento experimental, al principio recibió bastantes críticas por parte de la comunidad religiosa principalmente. Asimismo, había mucha desconfianza por parte de las personas, ya que era algo totalmente nuevo.
Para el 2010, la comunidad médica ya conocía el procedimiento y además lo aceptaba, por lo que se le otorgó un Premio Nobel de Medicina al Dr. Robert Edwards por su trabajo.
Actualmente las técnicas in vitro han tenido pequeños avances, que buscan mejorar sus procedimientos. Según un estadio realizado por el Congreso de la Sociedad Europea de Reproducción Humana y Embriología, en el 2018 había más de 8 millones de bebés que nacieron por medio del método in vitro.
