Hace exactamente 3 años, el COVID-19 tomó presencia en la vida de millones de mexicanos, los cuales se vieron afectados por las diversas modificaciones que hubo debido a la declaración de una pandemia y sobretodo por las personas que fallecieron a causa del virus que se hizo “popular” en la vida diaria.
Fue un viernes 13 de marzo de 2020 cuando instituciones, empresas y establecimientos frenaron sus operaciones, las cuales aparentemente estarían detenidas durante 2 semanas, pero que desafortunadamente se prolongaron mucho más de lo esperado.
Cuando se habla de un viernes 13, la fecha es relacionada a la “mala suerte” por diversas cuestiones, la más fuerte de ellas proviene del catolisismo; esto debido a que se cree que fue el día en que Jesús fue crucificado, pero claro que el inicio de una pandemia también marcaría este día como desafortunado.
Actualmente el COVID-19 continúa presente en la vida de millones de personas, principalmente de las que perdieron familiares por esta enfermedad.
En Querétaro, el total de casos acumulados hasta el 6 de marzo de 2023 es de 188 mil 223, mientras que las defunciones acumuladas son de 6 mil 936.
A pesar de que el virus ha sido controlado en estos últimos años, el miedo permanece en muchas personas, que quedaron marcadas por ese oscuro viernes 13 de marzo.
Algo curioso es que el día de ayer, que se cumplieron los tres años de este hecho, se registraron 13 defunciones por COVID-19, entre ellos la de un infante.
