Resulta increíble pensar que el burro: un animal tan presente en la cultura mexicana y que prácticamente imaginamos en cada pueblo de nuestro país podría estar amenazado y en peligro de extinción. Pero aunque ya está en ese riesgo, también ya hay iniciativas para proteger a esta especie: burrolandia.
Fundado en 2006: este santuario surgió al notar la preocupante disminución de la población de los burros en México. Según un censo que data de 1991: en aquel entonces se tenía registro de poco más de millón y medio de borricos en nuestro país. Sin embargo, en el más reciente conteo se encontró que apenas había 300,000 burros. Es decir, tres cuartas partes de la población desaparecieron en 25 años.
Ubicado en Otumba, Estado de México: con 46 ejemplares rescatados de rastros y maltrato: este santuario funciona además como un museo para hacer conciencia de este animal, como sus características e incluso interactuar con ellos al cepillarlos, alimentarlos o bañarlos.
El santuario recibe constantemente donaciones en especie de zanahorias, avena, cebada, alfalfa, y maíz: principales granos de los cuales se alimenta un burro. Si quiere visitarlos y ayudarles reencuentran en Calle estación. número 6 en Otumba, Estado de México donde además de ayudar puedes disfrutar de sus visitas guiadas.
