Siete años, tres dueños: la histórica incertidumbre de Gallos Blancos

6.3.2020
Opinión

La mañana de este miércoles inició con un fuerte rumor en redes sociales: Gallos Blancos cambiaría de ciudad y de nombre. Comunicadores de medios nacionales publicaron al unísono el rumor acerca del desarrollo de negociaciones en torno a que el equipo queretano pasará a ser 'El Atlante' y su sede sería en la Ciudad de México.

Fue apenas este martes cuando los dueños de Monarcas Morelia, más que despedirse de la ciudad que fue su casa durante más de medio siglo, se "congratuló" de llegar a Mazatlán, Sinaloa, su nuevo hogar. En medio de manifestaciones de repudio, resentimiento e insultos, las redes sociales estallaron en contra de la otrora franquicia michoacana; sin embargo, poco importó.

En medio de todo ese contexto, este miércoles inició con la noticia de que los Gallos Blancos podrían seguir los pasos de la llamada Furia Monarca. Un fuerte rumor acaparó las redes sociales en Querétaro: el equipo de primera división migraría de ciudad y cambiaría de nombre. El destino: la Ciudad de México. El nombre: El Atlante.

Figuras de alcance nacional lo repitieron tal y como repitieron la renuncia de Vucetich previo a que fuese oficial. Por la tarde-noche el club simplemente confirmó lo que ya se había dado previamente como un hecho: el "Rey Midas" dejaba el gallinero.

Esta es la franquicia que apagó las lágrimas de los aficionados en el 2013, justo cuando el equipo descendió sin jugar su último cotejo ante Chivas en el Clausura 2013. Una combinación de resultados les dejó fuera del máximo circuito, aunque al cabo de 16 días la noticia de la compra de Jaguares se confirmó. Amado Yáñez adquiría la franquicia chiapaneca y la traería a Querétaro. Gallos Blancos seguía vivo.

Posteriormente, el equipo fue incautado y las alarmas se encendieron en afición y plantilla laboral, incluyendo plantel deportivo. El entonces gobernador, José Calzada, intercedió ante la unidad de enajenación de bienes de la Secretaría de Hacienda y el club continuó operando, aunque sus cuentas pasaron a control de la autoridad. Amado Yáñez fue detenido por presunto lavado de dinero.

Las autoridades terminaron por subastar el equipo y fue la oferta de Grupo Ángeles, dueños también de Grupo Imagen, la que resultó ganadora. Una nueva era en la administración del equipo iniciaba. Fue hasta este torneo que todo dio un giro de 180 grados: Grupo Caliente adquiría el equipo, Imagen se hacía a un lado y todo indicaba que se escribiría una nueva historia en Querétaro.

El cuadro marcaba bien en el torneo; sin embargo, la pandemia y las medidas preventivas implementadas en todo México y el mundo, acabaron con la travesía competitiva del conjunto en el Clausura 2020. Ahora los aires de incertidumbre se apoderaron de afición y equipo. Fue apenas el martes cuando se informó sobre la renuncia del técnico; se habló de un recorte de sueldos a jugadores -un 50%-, la baja de la inversión para refuerzo y el panorama oscuro en cuanto a la reactivación sin público.

Si se toma en cuenta el panorama, la inversión en Gallos Blancos deberá activarse para ser redituable y todo indica que un posible cambio de sede y concepto podría ser la alternativa que Grupo Caliente implementará para su recién adquirido negocio.

Han sido siete años desde que la franquicia de Jaguares llegó a Querétaro para aliviar la tristeza del descenso. Los altibajos han sido múltiples y lo más inusual, cuatro administraciones (si se toma en cuenta el control de la Secretaría de Hacienda), y tres dueños particulares: Amado Yáñez, Grupo Ángeles y Grupo Caliente.

Una vez más Querétaro podría quedarse sin fútbol, en medio de una crisis que no termina de golpear al país.

Redacción IMGRicardo Sánchez

Lic. en Ciencias de la Comunicación

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